Con la llegada de Bravus a Chile, la marca decidió diferenciarse de su matriz en Estados Unidos, Bravus Brewing Co., desarrollando una identidad visual propia. El objetivo era conectar con un público local más joven y entusiasta, manteniendo la esencia artesanal pero incorporando un tono más fresco, alegre y cercano.
Como parte del desarrollo de esta nueva identidad, definí un sistema gráfico coherente que incluye una paleta de colores vibrantes, tipografías modernas y un estilo visual adaptable para redes sociales, sitio web y piezas impresas. Esta línea gráfica no solo unifica la comunicación de la marca, sino que también refuerza su personalidad y la posiciona con una voz clara dentro del mercado chileno.

Otros trabajos

Back to Top